Después de haber perdido a mi madre por el cáncer a la temprana edad de 54 años, así como la pérdida de niñas gemelas, mi trabajo y mi matrimonio, de repente desperté al hecho de que necesitaba encontrar un enfoque diferente de la vida. Había tocado fondo, y necesitaba cavar mi camino de regreso. Necesitaba soluciones —y rápido—.

Sabía que estaba estresada y que ponía en peligro mi salud. También era consciente de que mi propia historia genética era abismal. Si quería protegerme a mí y a mis seres queridos de dolencias y enfermedades, necesitaba encontrar respuestas alternativas. Era ahora o nunca.

Mi nuevo libro, Get Balanced, Get Blissed, explora un viaje personal de encontrar e implementar un enfoque “holístico” (“w”holistic en inglés) de la salud y la curación. Enfocarse en los cinco componentes del bienestar —el cuerpo, la mente, el ambiente, las relaciones y el espíritu— fue vital para restaurar mi vida al equilibrio y a la felicidad.

Al estudiar la nutrición basada en plantas a través de la Fundación T. Colin Campbell (actualmente, el Centro de Estudios en Nutrición de T. Colin Campbell), aprendí que tener una predisposición genética a una enfermedad no significa necesariamente que habrá expresión genética de la misma. Entender la capacidad del cuerpo para evitar la enfermedad fue empoderador y me proporcionó un marco para la solución que buscaba. Sin embargo, eso fue solo parte de la respuesta. Todavía estaba estresada e infeliz, y necesitaba resolver el resto de mi vida.

Nuestras mentes están inextricablemente ligadas a la salud de nuestros cuerpos. Aprender a calmarme, manejar el estrés y levantarme cuando más lo necesitaba era otra parte de la solución. Cuando aprendí a meditar (y más tarde a estudiarlo y enseñarlo), mi cuerpo se sintió más relajado, pude tomar mejores decisiones, estaba emocionalmente más equilibrada y mucho más en contacto con mi ser auténtico.

Después de toda una vida de hacer “lo correcto” —o al menos lo que yo creía que había sido lo correcto— aprendí a hacer lo correcto para mí. Me di cuenta de que no estamos solos en este trayecto de vida. Nuestra salud y bienestar están conectados con las relaciones que hacemos y el medio ambiente en el que vivimos. Al nutrir mi ambiente familiar, mi ambiente físico y mis conexiones interpersonales, me enriquecí y me empoderé. Estoy muy agradecida con la Fundación T. Colin Campbell (actualmente, el Centro de Estudios en Nutrición de T. Colin Campbell) por ayudarme a tomar el control de mi salud y mi vida. Get Balanced, Get Blissed no habría sido posible sin el trabajo de la Fundación.