Conocí a Matt cuando él tenía 39 años. Aún recuerdo mi primera llamada con él. Esperaba ponerse en forma para cuando cumpliera los 40, y mencionó su amor por correr y cómo no podía hacerlo tanto como quería debido al peso que llevaba. Me di cuenta por su energía de que estaba dispuesto a comprometerse, así que no me sorprendió que triunfara en su transformación. Utilizando el poder del entrenamiento de fuerza y un estilo de vida basado en plantas sin procesar (WFPB, por sus siglas en inglés), perdió un total de 74 libras (33.5 kg) en 10 meses.
Su historia me inspira. Me gusta compartirla con cualquiera que declara que no puede recuperar su salud y transformar su cuerpo — pues él tuvo que superar muchos obstáculos con los cuales la mayoría de nosotros nos podemos identificar. Tuvo que aprender una nueva forma de comer, ser paciente consigo mismo cuando el progreso no era rápido y mantenerse comprometido con el proceso. Le costó mucho esfuerzo, pero valió la pena.
Cuando acudió a mí por primera vez, no estaba seguro de cómo alimentarse con alimentos basados en plantas. En ese momento, él estaba consumiendo muchos alimentos veganos de transición. Lo ayudamos a avanzar hacia una alimentación más nutritiva y esto le funcionó de maravilla. Con su nuevo enfoque de alimentos basados en plantas con alto contenido de carbohidratos, logró grandes avances. Recuerdo el día que recibí un mensaje suyo diciendo que había corrido media maratón por diversión, algo que había decidido hacer espontáneamente. ¡Estaba corriendo y se sentía tan bien que terminó completando más de 13 millas (20.9 km)!
Después de confiar en el proceso, hacer el trabajo y bajar de peso, llegó el momento para asegurarse de no recuperar el peso que había perdido. Para lograrlo, pasó por nuestra fase de dieta inversa. Esto le ayudó a acelerar su metabolismo por cuatro meses para asegurarse de mantener la mejoría física por la cual tanto había trabajado. Finalmente, se sometió a una cirugía de recorte de piel debido a la pérdida de peso tan considerable.
Sinceramente, estoy muy orgullosa de Matt por todo su arduo trabajo. Como dije antes, tuvo altibajos. Pero así es la vida para todos nosotros. La vida no sabe si estás tratando de mejorar tu salud y estar en forma; ella sigue su curso. Siempre habrá emergencias o momentos en los cuales tus prioridades cambian con relación al trabajo o las personas en tu vida, pero no importa, no pasa nada. Hacerle frente a estas circunstancias cambiantes de la vida nos permite seguir avanzando en la dirección que hemos elegido. Eso fue lo que hizo Matt y tú también puedes hacerlo.
Somos uno de los mejores programas de coaching de alimentación basada en plantas sin procesar del mundo, habiendo ayudado a más de 650 personas hasta el momento. Hemos trabajado con personas que han superado todo tipo de problemas de salud, en diferentes etapas de la vida. La edad de nuestros clientes abarca de los 20 a los 80 años. Matt es sólo una de estas historias de éxito, pero la lección de su transformación es válida para todos: cambiando nuestra forma de comer y centrándonos en nuestro acondicionamiento físico, es posible transformar no sólo nuestro cuerpo, sino también nuestra vida. Podemos reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas, vivir más tiempo y mejorar nuestra calidad de vida.
Lo crucial es recordar que el mejor camino hacia un cuerpo triunfante, sano y en forma es un camino sostenido, no rápido. A menudo lo mejor o lo que necesitas es lo que no quieres hacer y el éxito depende de ir más despacio en lugar de intentar apresurar tu transformación.
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