La historia de la salud basada en plantas de Patricia

El 22 de noviembre de 2013 hice la elección de seguir una alimentación basada en plantas para ayudar a reducir los síntomas relacionados con problemas de salud crónicos.

Había estado lidiando con dolor en mi abdomen y espalda baja. Sabía que estaba más pesada de lo que había pesado en mi vida. Me despertaba en medio de la noche por el dolor, lo que me dejaba agotada durante el día. Cuando me levanté, me inclinaba unos cuantos pasos antes de poder levantarme. Me daban dolores agudos en las rodillas al subir y bajar escaleras. Sabía que necesitaba bajar de peso y le prometí a mi médico de cabecera que empezaría a nadar de nuevo y a vigilar mi alimentación. Pero, durante mi examen físico anual en el 2011, pedí pruebas adicionales para descubrir lo que causaba el dolor persistente en mi espalda y mi costado. Ya había presentado el dolor antes y traté de lidiar con él. No quería tomar medicamentos porque me hacían letárgica durante el día y no iban a resolver el problema. Mi doctora decidió comenzar con una tomografía computarizada.

Mientras esperaba los resultados, tuve un extraño accidente en mi patio trasero y rompí mi codo derecho. Fue una pesadilla, porque el día anterior a que se programara mi cirugía de codo, me notificaron que la tomografía computarizada había revelado una masa en mi riñón derecho, lo que me obligó a hacerme una resonancia magnética. El Dr. P. empleó varias horas acomodando mi codo de nuevo y, al mes siguiente, el Dr. D. usó un robot para realizar la nefrectomía con el fin de remover un tumor cancerígeno de mi riñón derecho. Fui a la cirugía con el brazo enyesado sin saber el resultado de esa lesión y rezando para que no encontraran más cáncer que el que vieron en la resonancia magnética.

Pasé aproximadamente 12 semanas en terapia física, tratando de recuperar la fuerza de mi brazo; la cirugía de riñón dejó mi área abdominal más sensible y débil que antes de la cirugía. Durante los siguientes dos años, el dolor en mi espalda resurgió y resonancias magnéticas adicionales determinaron que tenía múltiples discos abultados y artritis en mi columna vertebral. Tengo resonancias magnéticas y radiografías de tórax anuales para ver si el cáncer ha regresado o se ha expandido. Si sobrevivo cinco años, seré considerada una sobreviviente de cáncer, incluso si regresa en 6 años. El Dr. D. me dijo que la buena noticia es que lo detectaron temprano, pero la mala noticia es que es probable que este tipo de cáncer vuelva. Tomó un poco de gimnasia mental hacer frente a esa declaración y me sentí como si estuviera sentándome a esperar para enfermarme. El preocuparme por el cáncer y el dolor constante de las rodillas débiles y la artritis en mi espalda aumentó mi estrés. Me sentí terrible. Tuve que encontrar una manera de tomar el control. El regodeo de autocompasión estaba empezando a inundar cada parte de mi vida.

Ahí fue cuando empecé a buscar respuestas. Me uní al gimnasio a través de mi seguro de salud y comencé a escuchar Forks over Knives mientras caminaba sobre la cinta. Me encontré repitiendo el documental y otra vez y escuchando las entrevistas extendidas. Empecé a leer libros del Dr. Campbell, el Dr. Esselstyn y el Dr. McDougall. Otros videos como Food Matters y Hungry for Change contribuyeron a mi deseo de cambiar mi alimentación, pero las entrevistas de T. Colin Campbell y El Estudio de China me ayudaron a superar los obstáculos e iniciar este viaje hacia un estilo de vida basado en plantas. Finalmente, me matriculé en el programa para obtener el Certificado de Nutrición Basada en Plantas del Dr. T. Colin Campbell a través de eCornell y lo terminé en abril de 2014.

Ha pasado un año y me siento mucho mejor. Todavía estoy en este viaje y comienzo a ser más abierta sobre mi elección de estilo de vida. La gente me pregunta: “¿Por qué no comes carne o queso?”. Me hacen miradas extrañas y estoy segura de que piensan que es extremo. Pero, cuando estás luchando contra enfermedades que pueden revertirse con una buena nutrición, comer a base de plantas es una opción fácil en comparación con tomar medicamentos que con suerte matarán la enfermedad, pero te harán más débil.