Aquí, en el Centro de Estudios en Nutrición de T. Colin Campbell, estamos enfocados en la nutrición y la salud.
Pero lo que decidimos hacer por nuestra propia nutrición y salud tiene un efecto drástico en la salud del planeta, lo que a su vez tiene profundas implicaciones para nuestra salud social futura. Todos estos asuntos están interconectados, por lo que sería absurdo no pensar en las implicaciones más amplias de nuestras opciones alimentarias. Conociendo el poder que tienen las opciones de alimentos sobre la salud ambiental, no deberían sorprender, entonces, los recientes titulares de que Al Gore ha adoptado una alimentación basada en plantas (enlace).
En 2009 se publicaron dos informes que merecen la pena ser mencionados de nuevo aquí, ambos implican que la industria ganadera es una grave amenaza ambiental. El primero, un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition (enlace), comparó los “insumos” ambientales requeridos para las dietas vegetarianas adventistas con dietas no vegetarianas adventistas.
Al examinar los 11 grupos de alimentos diferentes que diferían entre las dos dietas, los investigadores encontraron que las dietas no vegetarianas requerían:
Parecía que el componente alimentario más ofensivo era la carne de res, que demandaba significativamente más recursos que otros grupos de alimentos.
Por supuesto, los insumos no son las únicas cosas que importan. La producción final también es importante, y la de la industria ganadera de los Estados Unidos no es bonita. Hay siete miles de millones de ganado en los Estados Unidos y “generan 130 veces más excremento que el producido por 300 millones de humanos” (U.S. General Accounting Office, citada en Marlow, y otros investigadores). ¿Crees que esto podría tener un impacto en nuestro suelo, aire y agua?
El segundo informe (enlace), escrito por dos expertos medioambientales muy experimentados en el Banco Mundial, encontró que la industria ganadera, en todo el mundo, era responsable de por lo menos el 51 % de todas las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. Vale la pena repetir: la mayoría de las emisiones de gases de efecto invernadero en el mundo entero se deben a una sola industria: la industria que existe solamente para que comamos animales.
Esto nos recuerda el Principio #8 de El Estudio de China: “Una buena nutrición crea salud en todas las áreas de nuestra existencia. Todas las partes están interconectadas”. Apoyamos el cambio alimentario de Al Gore y esperamos que inspire a otros a seguirlo.
Copyright 2024 Centro de Estudios en Nutrición. Todos los derechos reservados.