Temas » En la cocina » Evita el conteo de calorías. ¡Consume una alimentación basada en plantas y disfruta!
Centro de Estudios en Nutrición del Dr. T. Colin Campbell

Si eres un veterano de los alimentos vegetarianos o simplemente das tus primeros pasos en el trayecto hacia una alimentación basada en plantas, hay más recursos y soporte investigativo que nunca antes para hacer el cambio a una alimentación basada en plantas.

Eso es algo bueno.

Sin embargo, eso también puede presentar algunos desafíos debido al fenómeno de “demasiadas opciones”. Con la creciente popularidad de la alimentación vegetariana, vegana y basada en plantas sin procesar, la variedad de opiniones sobre la “mejor versión” puede llevar a confusión, frustración e incluso el abandono de tu misión para comer mejor.

¿Es hora de volver a los conocimientos básicos de la alimentación basada en plantas?

Para que vayas al grano y consigas lo que estás buscando —una mejor salud, un impacto medioambiental reducido, comer de manera más compasiva— ¿es hora simplemente de volver a los conocimientos básicos de la alimentación basada ​​en plantas?

En primer lugar, demos un vistazo a cómo muchas opciones pueden hacer que tu trayecto se estropee. Luego, subrayaremos algunos conocimientos básicos de la alimentación basada en plantas para que puedas volver fácilmente a reencaminarte.

Abrumado por el exceso de elección

La investigación nos dice que, entre más decisiones tengamos que tomar, más probable es que nuestro cerebro racional simplemente pueda fallar —junto con nuestra fuerza de voluntad y autocontrol—. El autocontrol es un elemento crítico en cualquier cambio de estilo de vida, y mucho más en un cambio tan arraigado como lo que comemos a diario. Sin embargo, la toma de decisiones presenta un estrés que martillea la corteza prefrontal del cerebro, nuestro centro de mando.

Inicialmente acuñado por Alvin Toffler en Future Shock[1], el exceso de elección —cuando tenemos demasiadas opciones— hace que la toma de decisiones sea abrumadora porque nos sentimos enfrentados a un exceso de resultados potenciales.

Demasiadas opciones, a menudo, nos hacen más propensos a no elegir nada en absoluto. Esta toma de decisiones debilita nuestro autocontrol. Es demasiado agobiante pensar en todas las alternativas.

De forma más específica, un número cada vez mayor de investigaciones sugiere que podemos tener dificultades para administrar elecciones complejas. Tener demasiadas opciones igual de buenas es mentalmente agotador, porque cada opción debe ser comparada contra alternativas para seleccionar la mejor. Nos desempeñamos bien cuando evaluamos la evidencia que compara las propiedades promotoras de la salud de, por ejemplo, una alimentación basada en plantas en comparación con la dieta americana estándar en comparación con una dieta rica en proteínas. La obsesión por las opciones dentro de la opción basada en las plantas también puede ser problemática. Agobiados por la responsabilidad de distinguir las buenas de las malas decisiones ocultas en la letra pequeña, tememos los riesgos que pueden resultar de hacer la elección (real o imaginada) incorrecta. Esto puede reducir seriamente nuestra motivación para hacer cualquier cambio en absoluto[2].

Pasar una tarde agonizando sobre exactamente cuántos pedazos de pan integral debes comer, si puedes poner algo de sal en tu olla de arroz, o si puedes poner una cucharadita de azúcar morena en tu avena mañana en la mañana probablemente desvíe tu atención de la tarea en cuestión —comer más alimentos basados en plantas sin procesar y menos de todo lo demás—.
Simplemente podría llevarte a abandonar tu meta de tener una buena salud.

Del mismo modo, invertir horas en preocuparte ansiosamente sobre la proporción exacta de almidones y vegetales en tu plato, o cómo hacer lugar para la cantidad ideal de kale o coles rizadas que deberías estar comiendo, puede conducir a una mentalidad de éxito/fracaso. Esto es a menudo por lo que se hunde la nave de “varias porciones son buenas” antes de que pueda salir del muelle.

Volver a los conocimientos básicos de la alimentación basada en plantas

Sabemos que un buen conocimiento básico basado en plantas se trata, al final del día, de llenar alrededor de la mitad de tu plato con vegetales ricos en almidón, cereales de grano entero, frijoles y legumbres. Llena la otra mitad de tu plato con vegetales frescos y frutas, y espolvorea nueces y semillas en cantidades moderadas. La cantidad exacta de cada ingrediente la decides de acuerdo con tus metas. Sin embargo, esta guía sencilla es suficiente para ponerte en marcha.

Para empezar —o avanzar de nuevo si te has quedado atascado en el camino— todo lo que necesitas hacer es aumentar la cantidad de vegetales, cereales de grano entero y vegetales ricos en almidón que estás comiendo. Las comidas procesadas ​​y los productos de origen animal se dejan a un lado y pueden inmediata o eventualmente ser excluidos para siempre. Comienza donde estás y aumenta las cantidades de alimentos basados en plantas sin procesar en tu plato.

Por ejemplo, si anteriormente el contenido vegetal en tu plato estaba compuesto en gran parte por salsa de tomate y una ensalada como acompañamiento ocasional, entonces es excelente que establezcas un estándar de una o dos porciones de vegetales de hojas verdes todos los días. Hazla tu meta para cada día de esta semana y, después de algunos días, reconsidérala. Esto compensa la sensación de estar abrumado y la procrastinación que la acompaña.

La prioridad debe ser disfrutar de lo que comes y aumentar tu consumo de alimentos basados en plantas sin procesar, mientras excluyes todo lo demás.
Abordar la transición hacia una vida basada en plantas desde una perspectiva positiva como esta —de vuelta a los conocimientos básicos de la alimentación basada en plantas—mantiene la mente feliz.

Y ese es el mejor antídoto para el exceso de elección.

Referencias

  1. Alvin Toffler, Future Shock. Bantam Books, 1970, New York.
  2. Iyengar SS1, Lepper MR. “When choice is demotivating: can one desire too much of a good thing?”, J Pers Soc Psychol. 2000 Dec;79(6):995-1006.

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