El documental The Game Changers presenta un caso convincente sobre la nutrición basada en plantas para los atletas

¿Sabías que casi la mitad de los jugadores de fútbol americano de los Titanes de Tennessee siguen una alimentación basada en plantas? ¿Y que uno de los hombres más fuertes del mundo es vegano? Algunos de los atletas más selectos del mundo están abandonando, cada vez más, los productos de origen animal, y están en la cima de su desempeño deportivo y prosperan.

Estas son solo algunos de los relatos que ayudan a guiar la trama de The Game Changers, un documental (que se estrenará en todo el mundo en Netflix el 16 de octubre de 2019) que expone los beneficios de consumir una alimentación basada en plantas. Producida por James Cameron, Arnold Schwarzenegger y Jackie Chan, la película no solo documenta a los atletas profesionales basados ​​en plantas en su búsqueda de la grandeza, sino que también incorpora la investigación científica para revelar por qué cambiarse a una alimentación basada en plantas puede ser el premio mayor, tanto para atletas como para gente del común.

“¿Cómo puedes ser tan fuerte como un buey sin comer carne?” Su respuesta es: “¿Alguna vez has visto un buey comiendo carne?”

La película ha sido acreditada por el Colegio Americano de la Medicina del Estilo de Vida, lo que significa que los médicos y las enfermeras en los Estados Unidos pueden obtener créditos al ver la película y responder un cuestionario al respecto. Y, según los cineastas, los médicos han estado pidiendo DVD y Blu-rays para repartirles a sus pacientes.

Hay muchas grandes historias de atletas que se destacan en sus disciplinas, entremezcladas con mitos comunes sobre la nutrición basada en plantas. A continuación, verás algunas de esas lecciones e historias.

Las proteínas de origen vegetal no son inferiores a las de origen animal, incluso cuando se trata de ganar masa muscular:

Es posible que escuches el argumento de que las proteínas basadas en plantas (o de origen vegetal) son “inferiores” y por lo tanto, necesita proteínas de origen animal. “Creo que uno de los conceptos erróneos más importantes es que tenemos que obtener proteína animal, en particular carne, para ser grandes y fuertes y rendir a un alto nivel; claramente eso no es cierto”, señala el Dr. James Loomis, exmédico del equipo de St. Louis Rams and Cardinals, quien es entrevistado en la película. Las proteínas son simplemente cadenas de aminoácidos, y algunas de esas cadenas no las puede producir nuestro cuerpo, por lo que debemos obtenerlas de los alimentos. Uno de los argumentos es que las proteínas de origen vegetal no son aminoácidos completos. Pero cada planta, en realidad, contiene los aminoácidos esenciales en proporciones variables. La investigación muestra que mientras la alimentación incluya la cantidad esencial de aminoácidos, la fuente es irrelevante. En la película, se sigue a Patrik Baboumian, un fisiculturista, ganador de varios premios, que rompe un récord mundial y da su filosofía sobre carne y fuerza, que se resume con una gran explicación. Él explica que a menudo le preguntan: “¿Cómo puedes ser tan fuerte como un buey sin comer carne?” Su respuesta es: “¿Alguna vez has visto un buey comiendo carne?”.

Los alimentos basados en plantas en realidad ofrecen un mejor “paquete de proteínas” para la recuperación atlética:

La recuperación es uno de los elementos más críticos de ser un atleta de élite.

Tu entrenas. Tú reparas. Tú repites. Y en la fase de reparación, la nutrición juega un papel fundamental, especialmente la proteína. Pero ¿qué paquete de proteínas ayudará al cuerpo a superar la inflamación y recuperarse mejor? En el paquete de proteínas basadas en carne, esta transporta moléculas inflamatorias y, en realidad, puede cambiar el microbioma y las bacterias en nuestro intestino, que han demostrado aumentar las hormonas productoras de inflamación. En el paquete de proteínas basadas en plantas, obtienes un paquete que promueve la optimización del microbioma y el suministro de sangre. Los alimentos basados en plantas también tienen 64 veces el contenido de antioxidantes de las comidas de origen animal. Incluso la lechuga arrepollada tiene más antioxidantes que el salmón y los huevos.

Muchos se sorprenden al saber que la mitad de los jugadores de los Titanes de Tennessee han abandonado por completo los productos de origen animal. El ímpetu para hacerlo se produjo después de que el defensa Derrick Morgan (entrevistado en la película) comenzó a leer investigaciones sobre alimentos basados en plantas y recuperación, y cómo comer los alimentos adecuados acelera el proceso de curación. La esposa de Derrick comenzó a cocinarle comidas basadas en plantas, y finalmente los otros muchachos se dieron cuenta. No solo les encantó la comida deliciosa, sino que los Titanes tuvieron su mejor temporada el año pasado. Y los jugadores basados ​​en plantas dijeron que se recuperan más rápido y tienen más energía.

En oposición a la creencia popular, nuestros antepasados ​​en realidad no fueron creados para comer carne:

Muchas personas preguntan esto: ¿Cómo puede la carne ser tan mala para nosotros si eso fue lo que comieron nuestros antepasados? Cuando pensamos en la alimentación humana antigua, muchos de nosotros imaginamos a un hombre con una lanza, saliendo a cazar animales y llevándolos a casa para alimentarse. Pero la investigación revela que los alimentos vegetales eran más importantes de lo que los registros arqueológicos les dan crédito. En la película, el Dr. Richard Wrangham, presidente de Antropología Biológica de la Universidad de Harvard, señala que, en la última década, los sitios paleolíticos han sido revisados ​​para revelar fósiles microscópicos de plantas que cuentan una historia diferente. Los primeros antepasados ​​humanos, en realidad, comían principalmente de forma vegetariana. Los humanos tampoco tenemos adaptaciones genéticas o fisiológicas para el consumo de carne, pero para el de las plantas, sí. Tenemos tractos digestivos más largos para una digestión lenta y para digerir los alimentos fibrosos. No podemos producir vitamina C y dependemos de las plantas para ese nutriente. Tenemos visión tricromática, que nos permite ver más colores, lo cual es importante para discernir entre vegetales, frutas y tipos de plantas. (Esto contrasta con los carnívoros, que tienen visión dicromática y ven solo dos colores primarios). Finalmente, nuestros dientes son cuadrados y bajos, destinados a moler, ideales para descomponer los alimentos vegetales. Nuestras propias bocas proporcionan algunas de las mejores pruebas que tenemos.

Los conceptos revelados en la película no solo están relacionados con los atletas y el rendimiento; las mismas funciones biológicas que afectan el rendimiento también impactan nuestra salud. Y hay muchos otros mitos desacreditados, como la falsedad de que la soya eleva los niveles de estrógeno y que las dietas bajas en carbohidratos y cetogénicas son mejores. También hay una explicación a profundidad sobre cómo el mercadeo y la publicidad, a lo largo de los años, ha propagado la idea de que la carne es “viril” y está asociada con la fuerza.

Documentales como The Game Changers pueden tener profundos impactos en el comportamiento; también pueden mover mercados, crear o deshacer negocios y llevar movimientos completos a un punto de inflexión. Desde películas como PlantPure Nation hasta What the Health, e innumerables otras, el aumento en los documentales que exponen la verdad sobre la vida basada en plantas ciertamente está contribuyendo a lograr un cambio.