Haciendo la paz con las opciones alimentarias en el Año Nuevo

Yo solía esperar mucho del 1 de enero. O de mi cumpleaños. O de un lunes. Una oportunidad para un nuevo comienzo. Adiós a lo viejo. ¡Vamos! Estoy preparada para el reto.

Excepto que no lo estaba. Verás, pasé treinta años luchando con la comida y la comida siempre ganó. Mis intentos de librarme de comer comida chatarra, comida rica en calorías y exceso de comida fueron inútiles mientras tanto yo esperara revolucionar todo en algún día que sugiriera “novedad”. Eso terminó finalmente cuando alguien me sentó y me dijo: “Deja de intentar cambiar el resto de tu vida. Solo debes estar a la altura de tu mejor conocimiento por el día de hoy”.

Este concepto simple de hacer elecciones que tienen sentido hoy, el único día que tengo, me salvó de la tiranía de las resoluciones frustradas y de las aspiraciones evaporadas. Podía comer la mejor comida de la que tenía conocimiento en el momento para el desayuno, el almuerzo y la cena. Ya fuera el 25 de diciembre o el 1 de enero o el 4 de julio, ese día era mío y lo sigue siendo. También es tuyo.

Cuando pones tus decisiones alimentarias en un contexto de “un día a la vez”, son manejables y accesibles. Tienes una maravillosa sensación de estar al mando de este asunto. No tienes que preocuparte por saber cómo preparar 365 platos basados en plantas; uno o dos son totalmente suficientes. No tienes que preocuparte por lo que vas a comer en la boda de tu hermana en tres meses a partir de ahora o tu viaje a Italia el próximo verano. Hoy vas a comer alimentos basados en plantas sin procesar y los disfrutarás, y te sentirás bien contigo mismo. Nupcias y Nápoles serán factibles, también, cuando la navegación por cada uno de ellos se convierta en la orden del día.

Como un día lleva al siguiente y al siguiente, ganarás experiencia. Te pondrás al tanto con las compras y la preparación de alimentos, comer fuera y viajar como alguien que come una alimentación basada en plantas, principalmente de alimentos sin procesar. Harás las paces con los días que no son perfectos —estar atrapado en un aeropuerto durante veinticuatro horas significa que es poco probable que cenes kale y quinua— y te sorprenderás de cuántos días, (por lo menos en el sentido alimentario) están en realidad tan cerca de ser perfectos como las cosas lo están en este planeta. Para ese entonces ya no estarás tratando de hacer algo nuevo. Será tu normalidad, solo que mejorada.

Esto no significa que no tenga en cuenta la transición de un año a otro y su invitación a limar asperezas y hacer las cosas mejor. Simplemente no establezco intenciones que me hagan fallar, y miro las áreas en las que quiero mejorar como un plan proyectado para todo un año, implementado un día a la vez. He estado comiendo de esta manera durante treinta y un años, pero ha habido una mejora gradual con el tiempo. Al inicio mi comida era una paleta sin color: pan de lentejas, pan de nueces, arroz integral, pan integral. Se ha transformado en un bufete de arcoíris que incluye vegetales de hojas verdes, frutas del bosque brillantes, ricos camotes(batatas) amarillos y calabaza, y la sorprendente variedad de vegetales de color morado del mercado de los agricultores. Pero si no hubiera comenzado por donde empecé, no estaría aquí ahora.

Así que permítete comenzar por donde empiezas. Es el lugar perfecto. Celebremos que es 2015 (bueno, casi) y que el trabajo del Dr. Campbell,otros investigadores y clínicos existe en el mundo, para que podamos confiar en la ciencia en lugar de adivinar al hacer nuestras elecciones alimentarias. Lee detenidamente los mejores libros de cocina vegana y sitios de recetas hasta encontrar maneras de hacer réplicas de platos con alimentos sin procesar que podrías extrañar.

Y obtén un sentido del Panorama General. Estás tratando a tu cuerpo de la mejor manera posible, pero también estás disminuyendo el sufrimiento de criaturas inocentes y defendiendo la sostenibilidad ambiental. Ninguna otra opción alimentaria puede afirmar esto, y creo que hay poder en eso, el poder de ayudarte a seguir con tu convicción porque no solo se trata de ti. Esta ha sido mi experiencia de todos modos, un día a la vez, desde que Reagan fue presidente y me hice un permanente en el cabello.