Gracias a incontables millones de dólares en propaganda, casi todo el mundo piensa que necesita leche.
Desde hace varias décadas, la leche de vaca y sus derivados se han visto como parte esencial de la dieta de la mayoría de los estadounidenses. La leche y sus derivados como el queso, el yogurt, el helado, el suero de leche, el kéfir y la mantequilla han sido efectivamente promovidos por el Plan de Mercadeo Unificado (Unified Marketing Plan)[1] con un presupuesto excesivo de 165 millones de dólares al año. Pero esta promoción no ha sido solo respecto a la publicidad. Las leyes federales ordenan que todos los colegios les suministren a los niños leche en cada comida o se enfrentarán a pérdidas de fondos federales. Los responsables de esta orden han escogido ignorar el hecho de que hasta el 90 por ciento de los niños afro-americanos, 70 por ciento de los asiáticos y 15 por ciento de los niños caucásicos no pueden digerir el azúcar (la lactosa) de la leche. Pese a esta y otras controversias acerca de las consecuencias en salud, el consumo de la leche ha aumentado constantemente desde 1980. La mitad de todo el consumo de lácteos (el consumo per cápita actualmente excede 584 libras al año) proviene en forma de queso, una forma muy concentrada de grasa saturada y sal que compromete la salud. De todos los animales del planeta, los humanos son las únicas criaturas que habitualmente consumen los productos lácteos de otra especie. Lo que se ha asumido como una práctica beneficiosa es, de hecho, más que solo cuestionable. La evidencia científica sugiere que las consecuencias de esta práctica son devastadoras.[2] Parece probable que no haya otro componente en la dieta moderna que cause más dolor y sufrimiento, incluyendo la muerte prematura e incapacidad, que los productos lácteos.
Hay evidencia científica convincente de que nuestro consumo de productos lácteos está fuertemente asociado con las siguientes condiciones
- Diabetes de inicio en la infancia (tipo 1)[3]
- Estreñimiento[4]
- Otitis media (infecciones de oído)[5]
- Congestión de senos paranasales y rinitis[6]
- Problemas de la piel que incluyen sarpullidos, dermatitis, eczema, urticaria y acné[8]
- Asma
- Alteraciones digestivas (incluyendo el síndrome de colon irritable y la enfermedad de Crohn)[9]
- Artritis y dolor articular[10]
- Cáncer (linfoma, leucemia)[11]
- Obesidad[12]
Los problemas de la leche son numerosos
- Las proteínas de la leche – Todos los productos lácteos, especialmente los productos bajos o sin grasa, contienen cantidades abundantes de proteínas lácteas. Las proteínas de la leche son las más implicadas comúnmente como factor causal en promover las enfermedades numeradas anteriormente.[13]
- Contaminación bacteriana – Los productos lácteos están entre las comidas más retiradas habitualmente del mercado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (US Food and Drug Administration, su sigla en inglés es FDA). por contaminación con bacterias como salmonela, estafilococo, listeria, E. coli 01573 y mycobacterium paratuberculosis.[14] La pasteurización mata a la mayoría de las bacterias encontradas en la leche; sin embargo, al hacer esto, también crea fragmentos que pueden ser comprometedores para la salud[15].
- Concentración biológica de toxinas – Todos los productos animales, incluyendo los productos lácteos, concentran biológicamente varios venenos, incluyendo pesticidas y otros contaminantes ambientales. La carne o los productos lácteos resultantes tienen altos niveles concentrados de estas toxinas.
- Hormonas – Para maximizar la producción de leche, las vacas lecheras son inyectadas habitualmente con hormona bovina del crecimiento recombinante (rbGH, en inglés). Esta hormona incrementa dramáticamente la producción de leche, pero también incrementa el factor de crecimiento insulínico tipo 1, del cual se ha mostrado que promueve el crecimiento de células cancerígenas.[16]
- Antibióticos – Grandes cantidades de antibióticos son suministrados al ganado lechero y pueden estar contribuyendo a los problemas en el aumento de cepas bacterianas resistentes a antibióticos.
- Intestino permeable – Las proteínas lácteas parecen estar particularmente adecuadas para estimular reacciones inmunológicas inapropiadas cuando se absorben a través de la una inflamación de la mucosa intestinal, un proceso comúnmente llamado “intestino permeable”. En pacientes vulnerables varios procesos inflamatorios son agravados y pueden estar asociados con muchos de los procesos de enfermedad enumerados anteriormente.[17]
- Ambiente – El proceso de criar ganado lechero para leche y carne es un gran usuario de agua fresca y uno de los principales contribuyentes a la contaminación del agua y el aire. Las dietas basadas en carnes y lácteos son muy severas para el ambiente.[18]
- Moral y ética – Algunas personas creen que la encarcelación de seres sensibles contra su voluntad es moralmente repugnante y rechazan el participar en una práctica que consideran inmoral y poco ética.
Referencias
- Dairy Management Inc. www.dairycheckoff.com
- www.drmcdougall.com
- Work Group on Cow’s Milk Protein and Diabetes Mellitus. Infant feeding practices and their possible relationship to the etiology of diabetes mellitus. Pediatrics 94:752, 1994.
- Iacono G. Intolerance of cow’s milk and chronic constipation in children. N Engl J Med. 1998 Oct 15;339(16):1100-4.
- Juntti H. Cow’s milk allergy is associated with recurrent otitis media during childhood. Acta Otolaryngol. 1999;119(8):867-73.
- Tikkanen S. Status of children with cow’s milk allergy in infancy by 10 years of age. Acta Paediatr. 2000 Oct;89(10):1174-80.
- www.nlm.nih.gov
- Oranje AP. Natural course of cow’s milk allergy in childhood atopic eczema/dermatitis syndrome. Ann Allergy Asthma Immunol. 2002 Dec;89(6 Suppl 1):52-5.
- Bahna S. Allergies to Milk. Grune and Stratton, New York.
- www.notmilk.com/tudrmac.html
- Johnson J. Molecular biology and pathogenesis of the human T-cell leukaemia/lymphotropic virus Type-1 (HTLV-1). Int J Exp Pathol. 2001 Jun;82(3):135-47.
- Barr SI. Effects of increased consumption of fluid milk on energy and nutrient intake, body weight, and cardiovascular risk factors in healthy older adults. J Am Diet Assoc. 2000 Jul;100(7):810-7.
- Campbell, TC. The China Study.
- Lund BM. Pasteurization of milk and the heat resistance of Mycobacterium avium subsp. paratuberculosis: a critical review of the data. Int J Food Microbiol. 2002 Jul 25;77(1-2):135-45.
- Nuotio L. Eradication of enzootic bovine leukosis from Finland. Prev Vet Med. 2003 May 30;59(1-2):43-9.
- Holmes MD. Dietary correlates of plasma insulin-like growth factor I and insulin-like growth factor binding protein 3 concentrations. Cancer Epidemiol Biomarkers Prev. 2002 Sep;11(9):852-61.
- Bahna, S. Allergies to Milk. Grune and Stratton, New York.
- Robbins, J. Diet for a New America.