Mi nombre es Didem Varol. Soy una dietista registrada, estudie en Canadá y ahora ejerzo entre Canadá y Turquía. Me gustaría contarles sobre la profunda transformación que experimenté después de descubrir la nutrición basada en plantas sin procesar.
Desde que me gradué de la universidad en 2009, he tratado de mantenerme al día con las novedades en el mundo de la nutrición. Sin embargo, fue sólo en 2016 cuando me encontré con el libro Integral del Dr. T. Colin Campbell cuando me di cuenta de lo sesgada que había sido toda mi formación y mi carrera. A medida que devoré más libros, artículos, y documentales relacionados con la nutrición basada en plantas sin procesar, me hundí cada vez más en una conmoción. De hecho, como lo explica la Dra. Melanie Joy 1 , aprendí y practiqué la “nutrición carnística”. Realmente nunca lo cuestioné porque asumí ingenuamente que las universidades eran centros imparciales de conocimiento desde los cuales se nos mostraba la forma “adecuada” de hacer las cosas.
Es decepcionante ver que los beneficios de una alimentación basada en plantas sin procesar no habían sido enfatizados en mi entrenamiento. Por supuesto, parte de la investigación no estaba al nivel que se encuentra hoy, pero teníamos estudios importantes que simplemente no se discutieron o se les dio poca importancia, como el Estudio de China o los ensayos de reversión de enfermedades cardíacas del Dr. Dean Ornish. Desafortunadamente, la investigación puede tardar 17 años en ponerse en práctica.[2]
Una vez que comencé, no me tomó mucho tiempo interesarme en este apasionante campo de la nutrición. Pronto me inscribí en el Certificado de Nutrición a Basada en Plantas un programa del Centro de Estudios de Nutrición y eCornell, y luego me convertí en instructora de “Comer para Vivir” del Comité de Médicos por una Medicina Responsable. Actualmente, estoy en el proceso de obtener mi certificación de Practicante de Medicina del Estilo de Vida a través del Colegio Americano de Medicina del Estilo de Vida.
Cuando algunas personas cambian su alimentación a una basada en plantas, experimentan una transformación de salud masiva. Este no fue mi caso, ya que no tenía problemas de peso o de salud preexistentes. Aún así, experimenté mejoras en mi salud y bienestar.
También cambié mi carrera, de ser dietista de salud pública pasé a tener mi propia práctica privada. Ya no quería “seguir la línea de pensamiento tradicional” y reiterar mensajes de nutrición obsoletos patrocinados por el gobierno. Para darles crédito, poco después de que dejé mi puesto, el gobierno de Canadá publicó su más reciente Guía de alimentos, la cual ha sido elogiada en todo el mundo por su enfoque en alimentos basados en plantas.[3]
Por supuesto, con este nuevo conocimiento, me animé a cambiar mi propia dieta. Soy una firme creyente en practicar lo que se predica. A pesar de ser vegetariana intermitente durante la mayor parte de mi vida, tuve una historia de amor con los lácteos que fue un desafío romper. Sin embargo fue imposible y muy pronto mis papilas gustativas y mi forma de pensar cambiaron tanto que hoy no es un problema.
Cuando algunas personas cambian su alimentación a una basada en plantas, experimentan una transformación de salud masiva. Este no fue mi caso, ya que no tenía problemas de peso o de salud preexistentes. Aún así, experimenté mejoras en mi salud y bienestar, sobre todo:
Ahora tengo una pequeña práctica médica privada y también paso mucho tiempo en mi país de origen, Turquía. El veganismo todavía está muy al margen allí; ¡Mucha gente me ha preguntado si es una religión! Hay mucho trabajo por hacer para educar a las personas sobre los beneficios de la nutrición basada en plantas para la salud humana, el medio ambiente, y los animales. ¡Me apasiona promover una alimentación basada en plantas sin procesar para cualquiera que esté dispuesto a escuchar! En lugar de lamentar por qué no descubrí y apliqué esto antes, disfruto el hecho de que ahora estoy viviendo una vida que está completamente alineada con mis valores.
Dondequiera que te encuentres en tu propia trayectoria de salud, espero que tu “semilla” florezca como lo hizo la mía.
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